Si nos ponemos melancólicos, el 25 de mayo es una fiesta patria para recordar y festejar. Aunque French y Beruti no regalaron escarapelas celestes y blancas, porque los colores patrios los inventó Manuel Belgrano algunos años despues. Aunque no hubieran paraguas en la plaza, porque se inventaron después. Aunque los patriotas que hicieron nacer la Argentina, estaban pensando en algo distinto.
Pero la nacion recuerda con orgullo el día que decidimos comenzar a vivir plenamente y en libertad. Dejamos de lado el sometimiento a España y nos declaramos en rebeldia. Seis años mas tarde nos declaramos independientes. Los argentinos siempre vamos un poco lentos, es una costumbre del pais.
Es raro festejar algo que no tenemos totalmente. Sin embargo, en todos los actos, se recuerda la libertad que conseguimos como nación.
Totalmente diferente es la libertad que Jesús nos ofrece. Él nos ofrece libertad del pecado. Libertad de la muerte. Nos ofrece darnos vida, y una vida que se pueda vivir plenamente.
En una sociedad donde para disfrutar de la vida, hay que cometer excesos, Jesucristo nos regala una vida que vivida plenamente, es equilibrada y sana. En lugar de esclavizar, libera.
No te dejes confundir por los distintos conceptos de libertad que hoy se proclaman en medios de difusion y en colegios. La libertad que te ofrecen es descontrolada. Y eso, a la corta o a la larga, te termina esclavizando, porque el pecdo no perdona, siempre lastima. Para se realmente libres, debemos vivir como Jesus quiere. El resto, es carton pintado.
Daniel Pérez Cliffe
Devocional PC “Tu momento con Dios cada dia”
